Una fría tarde de diciembre tuvimos la fortuna de visitar en exclusiva lo más oculto del Castillo de San Servando de Toledo. A continuación os contamos algunos secretos de este monumento tan importante de Toledo, visible desde gran parte de la ciudad y con gran historia.
Mientras trabajábamos para elaborar el libro «Toledo Secreto», uno de nuestros objetivos más claros era el famoso Castillo de San Servando. Tras contactar con la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y solicitar el pertinente permiso para realizar fotografías y visitar el lugar, tuvimos la suerte de estar acompañados por el personal que allí trabajaba, que nos mostró prácticamente todos los rincones que no suelen estar abiertos al público, como ahora veremos.
Un poco de historia del Castillo de San Servando de Toledo
No quisiéramos extendernos demasiado en la historia de este gran monumento de la ciudad declarado BIC en 1874 (ver declaración), tan sólo indicar que su origen pudo estar como baluarte para controlar el acceso al puente de Alcántara. Es muy probable que la fortaleza, como el del puente y una calzada cercana, sea de origen romano, posteriormente reutilizado por los musulmanes y tras 1085 reconquistado, sirviendo de monasterio bajo la advocación de San Servando y Germano.
Unas curiosas tumbas antropomorfas excavadas en la tierra atestiguan la antigüedad este paraje toledano:
Recuperado de nuevo por los almorávides en 1095, recibió asedio en 1114 siendo recuperado y entregado a la Catedral. Tras alguna algarada más de los almorávides durante el siglo XII y tras la victoria en las Navas de Tolosa, el peligro musulmán se alejó definitivamente.
Entre otras curiosidades más o menos legendarias que se narran sobre este famoso castillo, se cuenta que pudo pertenecer a la Orden de los Templarios, cedido por el rey Alfonso VI. Aquí también pudo velar armas El Cid Campeador antes de su reconciliación con el rey, según el Cantar de Mío Cid.
Parece cierto que el rey Alfonso X instaló una especie de observatorio astronómico en Toledo, en el Castillo de San Servando. Eso explica que tomasen como punto de referencia para sus mediciones astronómicas el meridiano que pasa por Toledo.
Luego pasó a ser ocupado por los frailes de Santiago hasta la extinción de la orden, quedando desde entonces abandonado, hasta que fue mandado reconstruir por el conocido arzobispo don Pedro Tenorio en 1386.
En el siglo XIV las luchas entre diversas familias provocan que el castillo retome su función militar, quedando en estado ruinoso y siendo reconstruido, llegando en un estado bastante lamentable hasta el siglo XIX y siendo sacado a subasta en 1873 por 3.500 pesetas.
Gracias a la mediación de la Comisión Provincial de Monumentos apoyada por la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, fue declarado monumento nacional, siendo el primer castillo de España en recibir esta distinción. Antes también había sido destinado a polvorín, que por suerte nunca explotó.
Antes de seguir, si te gusta lo que aquí contamos, suscríbete a nuestra lista de correo. Te enviaremos todas las novedades de nuestras páginas, noticias de Toledo, visitas guiadas y lo más destacado del grupo «LeyendasdeToledo» en Facebook directamente:
Pulsa aquí o completa el ANTERIOR formulario CON TU E-MAIL
Descripción del castillo de san servando
El castillo tiene un recinto rectangular, con torres circulares y huecas en tres de sus esquinas, y otra intermedia en la cara al Sur, protectora de un pequeño postigo. La puerta principal, hacia la ciudad, se abre en una especie de torre albarrana. Tras de ella está la del homenaje, de grandes dimensiones y muy saliente del edificio, con su parte exterior de planta curva. Lleva tres matacanes, que se repiten en la torre Sureste y está coronada de almenas sin saledizo, a plomo sobre los muros y con adarve interior. (Julio Porres: «Castillos de toledo»)
A partir de 1945 se hizo una reconstrucción, siendo utilizado como colegio menor, primera sede de las Cortes de Castilla-La Mancha, residencia universitaria y en la actualidad albergue juvenil.
Un paseo entre almenas
La parte que más nos sorprendió, pues no se visita por los riesgos de seguridad que conlleva, fue acceder a pasear entre las almenas. El patio de armas del castillo ya no se conserva como tal, fue cubierto en la última reforma, pero los torreones y almenas fueron recuperados y hay un cierto paseo de guardia que se puede realizar con ciertas precauciones. Las fotografías de Toledo desde ahí son increíbles:
Este paseo puede hacerse recorriendo el perímetro del castillo casi en su totalidad, viendo unas vistas maravillosas de Toledo, contemplando el Alcázar y la zona el Alficén.
No nos podíamos olvidar del fantasmas del Castillo, que también tiene:
La habitación encantada del Castillo de San Servando: T4
Una de las cosas que más llaman la atención es la gran cantidad de sucesos paranormales que nos narraron los trabajadores del Castillo en la visita: muebles que se mueven, puertas que se abren y cierran, sombras, ruidos nocturnos sin explicación alguna, el vigilante nocturno que se queda dormido arropado con una sábana que se retira de forma constante sola…
Cosas que podrían parecer «normales» en un castillo con tanta historia y leyendas (ver aquí la leyenda del Fantasma del Castillo de San Servando de Toledo aquí)
Nos contaban durante la visita un curioso suceso que ocurrió una noche en la que había poco público alojado en el albergue, no hace demasiado tiempo: un chico oriental se alojó el Castillo, solo, en la habitación que se encuentra en el torreón, la T4. A media noche, estando esa zona del castillo sin más personas alojadas, el chico bajó a la recepción a quejarse que alguien estaba correteando por la escalera que da acceso a su habitación…
La persona que se encargaba de hacer la noche en la recepción le indica que no hay nadie en esa zona el castillo, pero que le acompañaría para observar si alguien estaba haciendo trastadas por la zona… No encontraron a nadie.
Al rato, de nuevo el chico oriental baja diciendo que ahora estaban llamando a la puerta de forma insistente, con pequeños golpecitos. De nuevo suben y no encuentran nada, siendo altas horas de la madrugada ya… De nuevo se queda en su habitación.
A la media hora baja el chico muy alterado, casi sin poder articular palabra diciendo que un gran golpe en la puerta le había espantado mucho, y que quería quedarse a dormir en la recepción, que no aguantaba más en esa habitación maldita.
Allí durmió y al día siguiente se marchó del albergue.
Dadas estas experiencias (no es la primera ni será la última) desde entonces se intenta no asignar esa habitación T4 a ningún residente del albergue.
¿Dónde encontramos el Castillo de San Servando en Toledo?
- El castillo se encuentra en la Subida Castillo San Servando, 45006 Toledo.
- Teléfono de contacto: 925224558
- Ubicación en GoogleMaps y reseñas.
Tras conocer esta historia ¿te alojarías en la T4?
Descubre otras muchas curiosidades del Castillo de San Servando pulsando aquí.
Una visita guiada al Toledo Siniestro
En las visitas guiadas de Rutas de Toledo, especialmente en «Toledo Siniestro: casas y lugares encantados», se cuentan historias de fantasmas, donde pudieron (o no) suceder. Pulsa aquí para más información sobre «Toledo Siniestro».
Ramón Conde Olasagasti 15/07/2020
Posiblemente el que correteaba era algún niño de los muchos que estudiamos allí
guirito 21/04/2021
Sería su espíritu porque ya no estabais allí. En esa época era un albergue no un colegio menor.
Francisco Araque y Martin 01/01/2022
Yo estuve 7 años estudiando allí y,nunca oí esa historia del»fantasma del Castillo San Servando».
Alfonso 21/03/2022
Yo conocí a un Araque allí (1963) cuando el castillo era un Colegio Menor. Buen muchacho y un magnífico gimnasta. Aquellos «colegios menores» fueron muy importantes para la educación y formación de muchos alumnos. Creo que no se ha reconocido históricamente su contribución. Por cierto, no oíamos ningún fantasma.